Algunas personas reciben bien los comentarios. La mayoría de nosotros diría que recibir retroalimentación es genial, pero vamos, seamos sinceros, hay momentos en los que a todos nos resulta difícil no ponernos a la defensiva cuando estamos en el lado receptor de retroalimentación.
Es muy útil para capacitarse a sí mismo en recibir retroalimentación porque si puede manejar bien la retroalimentación, esto animará a otros a darle ¿adivina qué? más comentarios, pero el lado positivo es que esto le brinda más oportunidades para desarrollarse y mejorar su desempeño. También es importante recordar que no tiene que actuar en cada comentario que reciba.
Las siguientes pautas pueden ayudarlo a ser un buen receptor de comentarios.
1- Hace muchas preguntas para asegurarte de tener suficiente información sobre cualquier comentario negativo
Si no estás convencido o crees que no tienes suficiente explicación es muy importante cuando está en el extremo receptor de la retroalimentación, preguntes a la persona que da la retroalimentación: "¿Puedes proporcionar más ejemplos o información?”, Debes ser claro sobre lo que se estás diciendo. Trata de evitar sacar conclusiones precipitadas o ponerte inmediatamente a la defensiva. Si lo haces, las personas pueden reducir sus comentarios o es posible que no puedas usarlos por completo. Asegúrate de comprender los comentarios antes de responderlos. Una técnica útil puede ser parafrasear o repetir la crítica, para comprobar que has entendido.
2-Asegúrate de que la persona que te da la retroalimentación tenga la evidencia que la respalde.
Si un ejemplo parece infundado, busca un ejemplo concreto y pregunta: "¿Qué me has visto o escuchado hacer que te diga eso?"
3-Enfócate en el comportamiento, no en la personalidad.
En lugar de enojarte, ponerte a la defensiva o enojarte con la otra persona, hace todo lo posible por permanecer objetivo y neutral. Pregunta: "¿Qué me has visto hacer o decir que te lleve a esta conclusión?"
4-Descubra exactamente lo que se requiere.
No te apresures a desafiar o demostrar que la retroalimentación no es cierta. En su lugar, pregúntale a la otra persona: "¿Qué es lo que específicamente quieres ver o escuchar que haga de manera diferente?".
Los comentarios pueden resultar incómodos de escuchar, pero pueden ser extremadamente útiles. La gente puede pensar cosas sin decírnoslo y entonces podemos estar en desventaja. Recuerda que las personas tienen sus opiniones sobre tu persona y tendrán sus percepciones de tu comportamiento, y puede ser útil estar al tanto de ellas. Sin embargo, recuerda que también tienes derecho a expresar tu opinión y puedes optar por ignorarla por ser de poca importancia, irrelevante o referida a un comportamiento que por alguna otra razón deseas mantener.
5- Recuerda siempre que la retroalimentación es para tu propio beneficio
No importa cuán difícil sea la retroalimentación, piensa en ello e intenta usarla para tu beneficio, piensa y considera cada retroalimentación que recibas que es para tu propio beneficio.
6- Compruébalo con otros en lugar de confiar en una sola fuente.
Si confiamos en una fuente, entonces podemos imaginar que la opinión del individuo es compartida por todos. De hecho, si consultamos con otros, podemos encontrar que la experiencia de los demás es diferente y tendremos una visión más equilibrada de nosotros.
7- Solicita la retroalimentación que deseas
Pero no tenga en cuenta que la retroalimentación puede ser tan importante que es posible que tengamos que pedirla si no ocurre de forma natural.
8- Siéntete libre de reconocer el esfuerzo del donante y decidir lo que harás como resultado de la retroalimentación.
Cada uno de nosotros necesita saber cómo otras personas nos experimentan para extender nuestra autoconciencia, que está incompleta si es simplemente nuestra propia versión de ellos mismos. De modo que podemos utilizar los comentarios para ayudar a nuestro propio desarrollo. Cuando lo recibimos, podemos evaluar su valor, las consecuencias de ignorarlo o usarlo, y finalmente decidir qué haremos como resultado de ello.
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